En el año 2006 gracias a la generosa naturaleza que alberga y a su ubicación en medio del desierto el Hotel Nuevo Cantalloc tiene toda la semejanza a un oasis de paz. Un oasis donde libre del ruido, el tráfico y la contaminación se pueden comer frutos orgánicos directamente de nuestros árboles libres de químicos y estimulantes artificiales. Un oasis donde se puede pasear libremente entre caballos, vacas, alpacas, avestruces, llamas y una inagotable variedad de aves silvestres que viven en este lugar.